Cómo combatir la amenaza del Phishing
El phishing es cada vez más sofisticado y difícil de detectar. De hecho, hay casos que solo podrán ser detectados por los usuarios más atentos, ya que las imitaciones empiezan a estar realmente conseguidas. Sin embargo, la gran mayoría son detectables prestando la necesaria atención con unos consejos generales como:
- Utiliza el sentido común con esas promociones que “regalan” cualquier cosa. Desconfía siempre.
- No abras correos de usuarios desconocidos o que no hayas solicitado, elimínalos directamente.
- Ninguna empresa nos va a solicitar nuestros datos por correo electrónico.
- Especialmente las compañías financieras. Nunca te pedirán datos importantes.
- Desconfía de cualquier correo que te redireccione a otras páginas web.
- Entra siempre por una URL oficial protegida y segura con HTTPS. Asegúrate que tenga el certificado correspondiente.
- Cuidado especial con las URLs acortadas, suele ser un mecanismo que utilizan los estafadores para enmascarar los links maliciosos.
- Si recibes un mensaje de tu banco y tienes dudas busca asistencia a través de su página web, oficina física o páginas oficiales.
- Sospecha de las redacciones con faltas gramaticales, son producto de las traducciones automáticas y son todas falsas.
- Nunca compartas tus contraseñas con nadie a través de ningún medio de Internet.
- No descargues ningún archivo adjunto de este tipo de mensajes, incluso de conocidos. Es probable que incluya un troyano bancario.
- Si usas una app móvil, descarga siempre de sitios oficiales.
- Aumenta tu seguridad en general: contraseñas fuertes; software actualizado; navegación por sitios web de confianza….
En definitiva, prudencia y sentido común porque la amenaza del phishing es patente y los ataques de suplantación de identidad son cada vez más sofisticados. Y rentables. No se lo pongamos en bandeja.